Los vecinos advierten de que el parque natural del Túria en Riba-roja es "un polvorín"

La Policía Local desalojó ayer por la tarde algunas viviendas por el incendio declarado en la zona, el tercero en un mes, que ya se ha estabilizado

Los afectados piden más protección al medio natural: "La gente tira colillas y las autoridades miran hacia otro lado"

Desalojan a los primeros vecinos de Masía de Traver tras el incendio forestal en Riba-roja

Violeta Peraita

Los vecinos y las vecinas que residen junto al cauce del parque natural del río Túria en Riba-roja alertaron ayer que la zona es "un polvorín". El incendio que se inició ayer sobre las 14:11 horas de la tarde y que se dio por estabilizado por las autoridades de emergencias autonómicas más allá de las 23 horas ha dado lugar a una reflexión colectiva de la ciudadanía que más cerca está de este paraje.

"El desalojo lo hemos vivido con resignación, porque sabemos que vivir cerca de la naturaleza a veces puede conllevar estas emergencias, pero también estamos preocupados porque cada temporada hay al menos dos conatos y la gente tira colillas al parque natural. Más de una vez hemos tenido que apagar restos que quedaban encendidos", lamentaba ayer Carolina, una de las vecinas desalojadas de la urbanización Masía de Traver.

De hecho, esta mujer relataba ayer a este diario que "tenemos siempre preparada una maleta básica con una muda, las escrituras dela casa y las fotos no digitalizadas, que son las cosas que no podríamos recuperar si se quema la casa".

Varios vecinos cargan el coche para desalojar sus viviendas.

Varios vecinos cargan el coche para desalojar sus viviendas. / V.P.

No solo se desalojó ayer por la tarde a los vecinos y vecinas en la urbanización Masia de Traver, sino que también han tenido que evacuar varios chalets en núcleos de viviendas vecinos, también próximos al incendio.

"El parque natural está abandonado"

Javier, un vecino de la urbanización Valencia la Vella, un conglomerado de chalets cercano a Masia de Traver rogaba ayer a las autoridades en conversación con este periódico "más protección porque la gente tira botes, colillas y demás plásticos en un parque natural que está muy abandonado", señala. El mismo vecino, que ha sido evacuado junto a sus nietos, ha señalado que tienen "incertidumbre" de cara al futuro: "Se pasan la pelota entre los políticos, hay mucha desidia por parte de todos".

En ese mismo sentido, otro vecino de la misma zona, Joan Marco, evacuado en el Pou Vell, señalaba que el parque"es un polvorín, una bomba de relojería porque está descuidado y, por eso, cuando se quema los incendios parecen una falla”. Finalmente, apunta que “el Ayuntamiento de Riba-roja nos dice que no es competencia suya, pero nos tienen olvidados”, criticaba.

La zona tiene una gran parte de cañal que las autoridades tratan de erradicar, por ser una especie invasora, con grandes lonas negras que les privan de luz para crecer. Sin embargo, esta especie continúa en gran parte del paraje natural y se trata de una que prende con facilidad. De hecho, ayer los vecinos relataban que se habían percatado en un primer momento del incendio por escuchar la "explosión" de las cañas al arder. "Parecían tracas", precisaba ayer Enrique, un vecino de la zona a Levante-EMV.

Piden postes de vigilancia en el parque

Si algo pedían los vecinos era un mayor cuidado al entorno, que sufre con el vertido de latas, colillas y otros objetos que la gente que visita el paraje no recoge. Eso y que las autoridades se impliquen para mantener cuidada la vegetación y evitar, en caso de incendio, que las zonas secas propaguen las llamas. Además, varias personas consultadas aseguraban que desde que se pusieron en contacto por primera vez con el servicio de emergencias 112 hasta que llegó la primera dotación de bomberos, "pasó más de media hora".

Algo que achacan a que era sábado y a que no hay un centro de vigilancia cercano al parque. "Queremos que haya puntos de vigilancia cercanos a los distintos tramos del Túria. Esto es un parque natural y ha de estar asegurado, más que nada por prevención". Asimismo, señalan que en tan solo 10 minutos, "el primer foco se extendió a tres" y que una inmediata actuación podría haber facilitado el trabajo de extinción.

El incendio comenzó a primera hora de la tarde de este sábado en el término municipal de Riba-roja, frente a la urbanización Masía Traver. Según informó el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat Valenciana, el aviso el fuego se recibió poco antes de las 14.30 horas y obligó a decretar la situación 1 de Plan Especial de Incendios Forestales (PEIF).

Esta situación de emergencia se declara cuando la evolución previsible de un incendio puede afectar gravemente a bienes forestales y, en su caso, afectar levemente a la población y a bienes de naturaleza no forestal.